Se trata de Huawei, Lenovo, ZTE, Oppo y Foxconn (filial de la taiwanesa Hon Hai, pero cuya producción y operación se encuentran concentradas en China), las cuales recientemente anunciaron inversiones en el país o intenciones de quedarse con proyectos dentro de estas industrias.
“La necesidad de tecnología a bajo costo ha abierto una gran oportunidad para las empresas chinas”, dijo Eduardo García, representante de China Business México.
La semana pasada, Huawei, proveedor de soluciones de TICs, anunció una inversión de mil 500 millones de dólares en México para los próximos 5 años en la construcción de cuatro centros especializados en servicios de telecomunicaciones.
Esta firma ya provee infraestructura de telecomunicaciones a telefónicas como América Móvil, Movistar y Iusacell y está interesada en la licitación de la red mayorista que operará en la banda de 700 MHz, la cual requerirá inversiones cercanas a los 10 mil millones de dólares, según declaraciones de sus directivos y analistas.
Mark Xueman, CEO de Huawei México, dijo que la decisión de invertir está basada en las expectativas que se tienen para el crecimiento del país.
Entre las estrategias que seguirán las firmas tecnológicas para ingresar con éxito a México se encuentran las alianzas, como la que dio origen a China Communications Facilities Services Corporation, que es liderada por China Mobile, la cual según el Wall Street Journal es una de las interesadas en los activos que desincorporará América Móvil.
Por su parte, ZTE, la fabricante china de smartphones y tablets, invirtió 2.5 millones de dólares para su laboratorio de redes en la Ciudad de México con miras a expandir en 35 por ciento esta cifra en 2015.
Además, destinará 20 millones de dólares adicionales en los próximos 3 años en el rubro de innovación en medios digitales, con el objetivo de desarrollar la marca a través de nuevos canales de comercialización.
“En ZTE consideramos que estas reformas son una gran oportunidad. Creemos que las modificaciones en telecomunicaciones fomentarán la competencia y esto traerá consigo nuevos jugadores al mercado mexicano”, dijo Oscar Lara, vicepresidente de ZTE México.
Explicó que gracias a esta apertura del sector, ZTE tendrá la posibilidad de expandir su negocio en México, al ofrecer nuevos productos y servicios acordes a las necesidades del mercado.
Otra de las chinas en el rubro de tecnología y telecomunicaciones cuya expansión en el país avanza rápidamente es Oppo, que introdujo su línea de teléfonos inteligentes al mercado mexicano y que abrirá tiendas en las principales plazas comerciales para vender sus dispositivos de gama media y baja.
“Para Oppo, México es un país muy importante dado que es la puerta de entrada para todo el continente”, dijo Moisés Salame, director general de Oppo en México.
Otra que recientemente hizo anuncios importantes en el mercado mexicano fue Lenovo, cuya gama de smartphones fue presentada la semana pasada. La estrategia de Lenovo para sus nuevos dispositivos en México es proveer teléfonos que satisfagan las necesidades básicas de interconexión de los usuarios mexicanos, enfocadas a las gamas media y baja, cuyos precios pueden ir de los mil a los 5 mil pesos.
“Entraremos con productos apegados a la realidad del mercado”, dijo Alejandro García, director de Smartphones para América Latina de Lenovo.
Tras las reformas en telecomunicaciones, IDC pronostica que la industria de las TICs en México tendrá un crecimiento anual promedio de 10 por ciento en el próximo lustro, hasta alcanzar los 32 mil 171 millones de dólares en 2018.