El Consumo Privado presentó un avance de 1.2% en el trimestre 
abril-junio de 2014 con relación al mismo trimestre del año anterior, informó el 
INEGI.
La oferta global, que es igual a la 
demanda global, de bienes y servicios aumentó 3.12% a tasa anual 
desestacionalizadas para el segundo trimestre del 2014, cuando el periodo 
anterior el crecimiento fue de 1.30%, de acuerdo con datos del Sistema de 
Cuentas Nacionales de México (SCNM), base 2008, del Instituto Nacional de Estadística 
y Geografía. 
A su interior, con ajuste estacionario, el producto interno bruto (PIB) registró un incremento anual de 
2.73%, cifra mayor en relación al trimestre anterior (0.75%); en cuanto a las 
importaciones de bienes y servicios, éstas presentaron una desaceleración al 
pasar de 5.05 a 2.72 por ciento.
Por su parte, los elementos de la demanda global revelaron resultados 
alentadores. Las exportaciones de bienes y servicios presentaron la variación 
anual más alta con 6.80% desestacionalizado, tras aumentar 5.92% en los primeros 
tres meses del año; lo anterior es señal de una expansión en el sector externo 
debido, principalmente, a los datos positivos de la economía estadounidense.
Con series ajustadas por estacionalidad, el consumo privado, como la 
principal variable de la demanda, siguió la misma trayectoria de las ventas 
externas, al crecer 2.31% en el segundo trimestre.
Mientras, la formación bruta de capital fijo, que son los gastos que realizan 
las empresas en inversión fija bruta y no incluye activos financieros, subió, 
anualmente, 
1.44% 
desestacionalizado, después de caer 2.48% el trimestre anterior. Este 
incremento fue consecuencia de la actuación del rubro privado (3.28%), ya que el 
gasto público agudizó más su situación (de -8.19 a 8.45 por ciento).
El consumo de gobierno mostró una tasa anual ajustada por estacionalidad de 
2.12% para el trimestre referido; el ascenso anterior fue de 2.05 por 
ciento.
Si bien las tasas de crecimiento anual desestacionalizadas de la oferta 
(demanda) y sus componentes durante el primer semestre del 2014 son mayores que 
igual lapso del año pasado, aún están lejos de las exhibidas después de la 
reciente época recesiva. 
Efecto de semana santa
En su comparación anual y con cifras originales, la oferta global se elevó 
1.89% anual real en el segundo trimestre del 2014, resultado del aumento de 
1.56% del PIB y de 2.90% de las importaciones de bienes y servicios.
En la demanda global, el consumo privado y de gobierno ostentaron avances de 
1.23 y 2.06%, respectivamente.
La 
Formación 
Bruta de Capital Fijo mostró un desplome anual de 0.51%, debido al retroceso 
de la construcción pública y al avance de la privada. Asimismo, las 
exportaciones de bienes y servicios registraron una tasa de 5.81 por ciento.
Destaca que el crecimiento del PIB se derivó, fundamentalmente, del desempeño 
positivo de las ventas al exterior y del consumo privado.
Además, este comportamiento a tasa anual durante el trimestre de referencia, 
es menor en la mayoría de las variables macroeconómicas por la influencia del 
efecto de la semana santa, que en el 2013 fue en el periodo enero-marzo, 
mientras que en este año sucedió entre abril y junio, que significa que en el 
segundo trimestre del 2014 hubo un menor número de días laborables que en el 
mismo lapso del año anterior.
Para Joan Enric Domene, economista del Grupo Financiero Invex, señaló que el 
dinamismo del gasto público, aunque ha mejorado, sigue sin materializarse en la 
inversión pública, debido a que se contrajo, por lo que se considera que la 
inversión pública se hará notar en la segunda mitad del año y, a su vez, la 
contribución al crecimiento será positiva.
En cuanto al sector externo, el especialista aseveró que se espera en la 
segunda mitad del 2014 firmeza del sector industrial, refuerzo del consumo 
estadounidense a las exportaciones y un mejor dinamismo del consumo privado y de 
inversión, derivado parcialmente del gasto público. 
rodrigo.rosales@eleconomista.mx